¿Estás embarazada de 5 meses? Ahora sí. Ya comenzarás a sentir a tu bebé y las patadas que da. Además, comenzarás a notar un ligero dolor en la parte inferior del abdomen debido al continuo estiramiento de los ligamientos que sostienen al útero. Tu pulso aumentará y tu piel puede sufrir cambios de pigmentación, por lo que es recomendable usar protectores solares (sí, también en invierno) o hidratantes con filtro.
¿Quieres saber cuál es la evolución de tu bebé en este mes?
En la semana 18 el feto comienza a oír sonidos del interior de tu cuerpo (tu voz, tu corazón…) y también comienza a percibir la claridad rojiza que inunda el útero cuando el sol o cualquier otra luz ilumina tu vientre. Por otra parte, se ponen en marcha la glándula tiroides, que funciona gracias al yodo y permite que otra glándula, la hipófisis, segregue más hormona del crecimiento.
Por otra parte, empieza a acumularse en el intestino el meconio, el primer excremento del bebé. El bebé ya pesa aproximadamente 160 gramos.
Es a partir de la semana 19 cuando habitualmente se comienza a notar la presencia del pequeño o pequeña, aunque en algunos casos este momento se puede retrasar aún alguna semana. Comienza a desarrollarse con rapidez tanto a nivel cerebral como sensitivo uno de los sentidos del bebé: el tacto. Es por ello que se toca las manos, los pies y la cara y agarra y aprieta el cordón umbilical. El intestino comienza a fabricar jugos gástricos que ayudarán a absorber el líquido amniótico y trasladarlo a los riñones, donde se filtra y vuelve a ser expulsado al saco amniótico. Su peso es ahora de aproximadamente 200 gramos.
¿Qué pasa en la semana 20? Es cuando tiene lugar la segunda ecografía (se recomienda entre la semana 18 y la 22). En esta ecografía todavía podrás ver entero a tu bebé, ya que en las próximas ya lo verás por partes.
Si el aparato con el cuál te hacen la ecografía tiene doppler podrás escuchar su corazón, que como es tan pequeño, late muy deprisa (140-160 latidos por minuto).
Además, ya puede reconocer la voz de la madre y puede estirar las extremidades. En esta ecografía suelen ya decir con seguridad si el futuro bebé es niño o niña, aunque si ya te has hecho el test prenatal no invasivo, ya conocerás desde hace 10 semanas aproximadamente esta información.
En la semana 21 se cruza el ecuador del embarazo. El bebé desarrolla especialmente el sentido del oído, percibiendo ya más sonidos exteriores. Si alguno le asusta o desagrada, ya se sorprende y reacciona. Por ello, es importante lanzarle ya estímulos agradables.
Por otra parte, en su epidermis se han desarrollado ya unas papilas táctiles, sobre todo en los dedos y en la lengua.
En la semana 21, el feto duerme aproximadamente 20 horas al día, con muchos despertares breves. Su sueño no coincide con el de la madre, por lo que muchas noches podrás notarlo alterado. Esto es debido, en líneas generales, porque cuando tú te mueves, él mecido por el líquido amniótico, descansa. Sin embargo, cuando tú estás descansada, él se agita.
Registrando las ondas cerebrales se ha comprobado que a partir de esta semana, el feto ya comienza a tener fases de sueño REM (se sueña) y no REM.
En esta semana las glándulas sexuales hacen madurar los genitales externos: surge la vagina en las niñas y un diminuto pene en los niños, donde se formará un esperma primario. El bebé ya tiene glándulas sudoríficas y su piel es menos transparente, aunque todavía pueden verse los vasos sanguíneos. El páncreas entra en funcionamiento también esta semana.